En medio de la preocupación en el mundo por los cambios generados por el calentamiento global y aunque sólo el 2%  del 71% de la superficie terrestre es agua potable, el llamado a la población en general está centrado en el cuidado y la preservación de este líquido preciado.

El departamento del Atlántico, en materia de cobertura de agua potable, ha tenido avances significativos en los últimos 13 años, desde el gobierno de Carlos Rodado en el 2004, donde se definió un esquema de operador especializado y acueductos regionales especializados en un plan departamental de aguas. 

Pedro Lemus, secretario privado de la Gobernación del Atlántico, señaló que actualmente la cobertura urbana en esta materia es del 98.6% mientras que en la zona rural es del 90%, “hay que aclarar que hay sectores que se abastecen de pozos profundos y no hay continuidad, frecuencia, y la calidad que desearíamos pero tienen una cobertura que ha crecido en centros nucleados como corregimientos. Nos queda el reto de zonas rurales dispersas como las veredas donde no llega la cobertura del acueducto actual, pero se han visto avances significativos”, indicó Lemus.

El secretario privado dijo que en sí todo el departamento se ha visto beneficiado con los avances en agua potable, pero dijo que el reto que tienen ahora es definir un operador especializado para el sur del Atlántico “se han hecho inversiones importantes en materia de acueducto y alcantarillado pero por falta de un operador especializado, estos acueductos no prestan un servicio óptimo. La empresa de acueductos del Sur, Aresur, adelanta un proceso licitatorio para identificar un operador especializado que se encargue del manejo de los servicios de agua y alcantarillado en los municipios del sur”.

Retos

Lemus recalcó que la administración departamental debe afrontar varios retos para alcanzar la meta del 100% de cobertura del servicio de acueducto y alcantarillado.

“Se realizarán unas inversiones en Luruaco, que constan de cambiar la fuente de toma del agua en la bocatoma de la Ciénaga de Luruaco  y llevarla al canal del Dique, instalando una tubería de aproximadamente 32 kilómetros, con la que se lograría tener agua 100% potable, las 24 horas del día, los 7 días de a semana en la cabecera de Luruaro y sus corregimientos”, puntualizó el funcionario, quien además mencionó que con esto, se lograría alcanzar un impacto positivo de salubridad en la población, porque, actualmente, los corregimientos no cuentan con un servicio continuo y potable de agua de calidad.

Agregó que realizando este trabajo, se podrá  preservar el ecosistema de ese cuerpo de agua que actualmente es frágil “esto va a permitir reverdecer y conservar esta reserva, con lo que a futuro se podrá habilitar para otras actividad recreativas”.

Por otra parte, también se han gestionado recursos por el orden de los $36 mil millones para un proyecto que viabilizó el Ministerio del Agua para construcción un tanque de agua en el cerro de Cupino en Puerto Colombia con el que se alcanzaría una cobertura del 100%.

“Si esto no se hace, no se  podrán desarrollar más proyectos inmobiliarios porque, no habría factibilidad para garantizar el servicio para nuevos proyectos; con el nuevo tanque, que tiene un valor de  $7 mil millones, que fueron  viabilizados por el Ministerio, podríamos tener agua para los próximos 20 años en Puerto”, indicó Lemus.

El tercer reto de la administración departamental, tienen que ver con la ampliación de una planta de tratamiento de agua en Sabanagrande por medio de un acueducto regional que comprende a los municipios de Sabanagrande, Santo Tomás, Palmar, Sabanalarga Polonuevo y Baranoa. Que con la inversión de $18 mil millones, se permitiría garantizar la cobertura de agua potable para los próximos 20 años.

El proyecto tiene viabilidad, y según Pedro Lemus, Campeche, Sibarco y Pital de Megua también se verían beneficiados.

El cuarto reto tiene que ver con los sistemas de acueductos en los corregimientos de Sabanalarga, como los son: Patilla, Gallego, Mirador, Aguada de Pablo, La Peña y Molineros “tenemos un proyecto estructurado de acueductos rurales con el Ministerio, por un valor cercano a los $7 mil millones, con los que se permitiría tener agua potable de buena calidad a esos corregimientos”, dijo el secretario privado.
Igualmente, en Galapa se vienen gestionando acciones para construir tanques de almacenamiento para lograr una cobertura del 100% en ese municipio.

Llamado a la conservación del agua

Lemus hizo un llamado a todos los atlanticenses y a la población en general para conservar las 20.000 hectáreas de cuerpos de agua con los que cuenta el departamento “con toda esta política que se está adelantando de acueductos y alcantarillados pretendemos tener y habilitar todos los cuerpos de agua para el turismo, la pesca y actividades económicas, que sirvan para el deleite de las familias”.

Lemus finalizó su intervención señalando que el agua es un recurso natural que se agota, por lo que todos tenemos responsabilidad en cuidarla “desde casa hay que planificar políticas de conservación y ahorro. Y aunque estamos lejos de tener un racionamiento de agua, hay que preservarla no sólo para nosotros en la actualidad sino para las generaciones venideras”, precisó el funcionario.